Por fin llegó el verano. Todos esperamos que Godojos se anime
con la llegada de los veraneantes. Hace años Godojos se llenaba de actividad
con las labores del campo propias de la época: la siega, el acarreo, la trilla,
aventar, o sea separar la paja del trigo o de la cebada y la recogida de la
paja. La vida de Godojos durante casi un mes se trasladaba a las eras. Mucho
sol, canciones, voces a las mulas, vueltas y vueltas trillando en las eras,
visitas frecuentes a la sombra y a los botijos llenos de agua fresca de la
fuente. Meriendas al atardecer con ricas y jugosas ensaladas de rojo tomate.
Miradas a la veleta de la casa del castillo, para ver si soplaba el viento
Solano y mucha alegría porque se recogía el fruto de muchos sudores. Las
labores de las eras se terminaban con la trilla de las granzas, porque en
Godojos se aprovechaba todo.
Ahora las cosas han cambiado. No se siega, no se trilla y lo
poco que se cosecha se realiza con enormes y poderosas máquinas. Sí se visitan
algunos melonares y se recogen aquellos que están maduros. Se sigue disfrutando
del frescor de las bodegas y de algunos traguillos de vino a su debida
temperatura, que reconfortan el cuerpo y el espíritu.
Es agradable tomar el vermut en la terraza del bar, disfrutar
de pequeños paseos al atardecer y de las frescas y animadas veladas nocturnas
tomando un cubata o un chupito con hielo.
Está próxima la celebración de la fiesta veraniega de
Godojos. Sé que estará animada y que disfrutaréis todos de ella en alegre
armonía.
FALLECIMIENTO DE LUISA MONGE
Hace unos días me comunicó mi prima Conchita el fallecimiento
de Luisa. Siempre que perdemos a alguien de Godojos resuena en mis oídos el
triste y plañidero son de nuestras campanas tocadas por el Borque. Es una
hermosa manera de decir adiós a los seres queridos del pueblo. Es una forma de
rezar y de pedir a Dios que los acoja en su gloria.
Luisa era la madre de Faustino, a quien aprecio, y de otras
dos hijas. A él y a ellas mis
condolencias.
Volviendo a mis recuerdos de niño os diré que guardo en mi
memoria la figura de su padre, a quien en el pueblo se le conocía como el tío
Faustino “el sordo”. Su madre se llamaba Leocadia y sus hermanos eran David,
Mario y Heraclio. El tío Faustino murió en unas fiestas de san Gregorio y la
banda de música tocó en su entierro.
Que Luisa, vecina de nuestro pueblo, descanse en PAZ.
CARLOS ALDA.
MIAMI PLAYA. 21 DE JULIO DE 2013